HÁZTE SOCIO!!!
Regístrate aquí si quieres que te avisemos vía e-mail de las actualizaciones,
y recoge tus
REGALOS GRATIS de bienvenida.
Restauración de la Catedral de Palma de Mallorca (1903-1914)

Poco después de conquistar la isla de Mallorca, el rey Jaume I inició (año 1230) la remodelación de la antigua mezquita musulmana de la capital insular para convertirla en una iglesia gótica.

Las obras de construcción se alargaron hasta el año 1630 y dieron como resultado una catedral de 120 m. de longitud por 58 m. de ancho, con una altura máxima de 44 m. en la nave central, cuyas bóvedas se sostienen sobre unas esbeltas columnas de planta octogonal de 1,5m de diámetro y 22 m. de altura.

En 1840 ya se empezó a pensar en la traslación del coro de los canónigos y la reparación de la fachada. En 1852 se iniciaron las obras y se pidió ayuda al gobierno, que designó al arquitecto Peyronnet como director de las obras.

En Noviembre de 1899 el obispo de Mallorca Pere Campins visitó Barcelona para pedir a Gaudí su opinión sobre las obras de restauración de la sede mallorquina. Campins quedó tan asombrado de la claridad de ideas de Gaudí que en 1901 le propuso hacerse cargo de la restauración.

Gaudí enseguida decidió pasar unos días en Palma de Mallorca para tomar medidas y conocer mejor el edificio. Al cabo de unos meses presentó un proyectó junto con una maqueta de madera al obispo, que debía seguir sorprendido con las propuestas del arquitecto.

A continuación resumimos las principales actuaciones que Antoni Gaudí llevó a cabo en la iglesia:

- Traslación de la sillería gótica del coro del centro de la nave hasta colocarla en el presbiterio, alrededor del altar mayor. Además, Jujol dio color a la sillería con vivos colores que no gustaron mucho a los canónigos.

- Desmonte del corredor de los cirios, en las paredes de la capilla real.

- Decoración del presbiterio con un aplacado de cerámica representando los escudos de los obispos de Mallorca rodeados de ramas de árboles.

- Desmonte del retablo barroco del presbiterio y traslado a la iglesia de Santa Catalina.

- Desmonte del retablo gótico y reinstalación en la puerta del Mirador.

- Colocación del altar mayor frente a la cátedra episcopal descubierta tras el retablo gótico.

- Colocación de inscripciones de hierro forjado en latín en el muro que rodea la cátedra episcopal.

- Construcción de una barandilla para el presbiterio en hierro forjado.

- Colocación de lámparas y candelabros de diferentes diseños de hierro forjado.

- Colocación de dos baldaquinos sobre el altar mayor.

- Colocación de tribunas para cantores a lado y lado del presbiterio, formado por elementos platerescos.

- Construcción de dos púlpitos en las columnas más cercanas al altar, uno de los cuales quedó incompleto y fue desmontado en enero de 1970.

- Además se colocaron diversos lampadarios en la entrada de la capilla real y en las naves laterales.

Y otras dos aportaciones importantes de Gaudí a la bella catedral son el mobiliario y las vidrieras.
Del mobiliario destacan el banco para los oficiantes del altar, un taburete, un atril y la preciosa escalera plegable para acceder a la exposición del Santísimo Sacramento.

En esta catedral Gaudí utilizó un nuevo método para dar color a las vidrieras, con la intención de ensayar para ponerlo en la Sagrada Familia, y que consistía en superponer tres cristales de colores primarios (amarillo, azul y rojo).

También recuperó los rosetones y vidrieras que estaban tapiados.

Durante sus estancias en la isla Gaudí realizó otros trabajos menores como es la restauración de la capilla de San Bernardo, el diseño del pavimento de la iglesia parroquial de Pollença o reformas en el propio Palacio Episcopal.

Gaudí abandonó las obras de la Catedral de Palma de Mallorca en 1914 después de una discusión con el contratista a propósito de los pináculos de la puerta del Mirador. La muerte del obispo Campins al cabo de poco tiempo hizo que las obras se pararan definitivamente.