Concurso
Verdades y Errores
sobre Gaudí
Respuestas
a las preguntas de la sexta serie
I.6.-
Qué proyecto de fin de carrera/ reválida presentó
Gaudí en 1877 para conseguir el título de arquitecto?
Proyecto de fin de carrera de Gaudí. Clicar sobre
la imagen para verla ampliada |
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El proyecto
de final de carrera era el del paraninfo de una Universidad
Central. Bella y minuciosamente acuarelado, tiene un paraninfo
de planta oval, con un amplio salón totalmente
ecléctico, que tiene la mitad de su ámbito
destinada para el público y la otra mitad para
el claustro de profesores, con una arcada sostenida por
columnas, un conjunto que está claramente inspirado
en el Royal Albert Hall de Londres.
Las pinturas que ornan la cúpula, perforada por
una linterna para permitir la entrada de luz natural,
tienen representaciones mitológicas y el Partenón
de Atenas, unos detalles perfectamente discernibles gracias
a las ampliaciones fotográficas y los sitiales
están representados con el anagrama de la Universidad
Central, combinación de las letras U y C superpuestas.
Afortunadamente este hermoso proyecto -íntegro-
se ha conservado hasta nuestros días por el hecho
de pertenecer a la Escuela de Arquitectura, salvándose
así del incendio que en 1936 consumió la
inmensa mayoría de los dibujos de Gaudí,
quien tan celosamente los conservaba en su taller.
No obstante,
la calificación obtenida por Gaudí fue la
de aprobado por mayoría, una de las más
bajas posibles. Esta mala nota puede explicarse porque
se dió la circunstancia que el director de la Escuela
de Arquitectura de Barcelona -y miembro del tribunal-,
Elías Rogent y Amat (1821-1897), campeón
del neomedievalismo catalán, era el autor del entonces
único edificio de la Universidad de Barcelona,
que albergaba todas las facultades. La Universidad, situada
en la plaza homónima, ocupa dos manzanas del Ensanche
y es de estilo gótico civil italiano, que estuvo
de moda en el ámbito alemán, donde era conocido
con el nombre de Rundbogenstil -o sea, literalmente, el
estilo del arco de medio punto-.
También
es de Rogent el edificio del Seminario Conciliar, del
mismo estilo, emplazado justo detrás de la Universidad
y actualmente recuperado para la ciudad, una vez demolido
el alto muro que desde su edificación lo circundaba
por completo, erigido para conservar la pureza de los
seminaristas, aislándolos del "mundanal ruido".
Rogent comentó
a los otros miembros del tribunal académico en
el momento de otorgarle el título a Gaudí
"no sé si le damos el título a un genio
o a un loco". Gaudí comentó: "Dicen
que ya soy arquitecto".
Bassegoda Nonell,
El Gran Gaudí, Sabadell, 1989, págs.
64-66.
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Universidad
de Barcelona |
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Elías
Rogent
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II.6.
En qué país de América se está realizando
actualmente un proyecto que Gaudí diseñó
en 1922?
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Angélico Aranda, en 1910
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Sección de la capilla de Rancagua |
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En
1922 el franciscano chileno Angélico Aranda, quien
además era un artista formado en la Academia Española
de Roma, escribió a Gaudí para encargarle
el diseño de la capilla de su convento en Rancagua,
sita a 80 kilómetros al sur de Santiago. La capilla
tenía que estar dedicada a Nuestra Señora
de los Ángeles o Porciúncula.
Gaudí, quien desde 1914 había abandonado todos
los encargos profesionales para dedicarse exclusivamente
a la Sagrada Familia, contestó la carta al franciscano
diciéndole que no podía encargarse de ese
proyecto pero que, dado que las dimensiones de su iglesia
coincidían con las de la capilla de la Asunción
de la Virgen -que centra la parte posterior del claustro
del Templo-, le brindaba los planos de ésta. Sin
embargo, finalmente no se llevaron a cabo.
Recientemente
se ha recuperado la voluntad de erigir en tierras americanas
esta capilla gaudiniana, gracias al excelente trabajo
de un grupo de arquitectos y entusiastas del arte chilenos.
Cuando finalmente se construya esta hermosa capilla tendremos
la particularidad, poco frecuente en la historia de la
arquitectura, que se levante antes la "réplica"
de un edificio que el original.
J. F. Ráfols,
Gaudí, Barcelona, 1929, pág. 270.
Bassegoda Nonell, El Gran Gaudí, Sabadell,
1989, pág. 581.
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III.6.
A qué escritor de la generación del 98 no le gustó
la Sagrada Familia?
Unamuno, Maragall, Pijoan y Gaudí. Dibujo de Ricard
Opisso |
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El
polémico escritor, catedrático y rector de
la Universidad de Salamanca Miguel de Unamuno (1864-1936)
con motivo de una visita a la Sagrada Familia en 1906 -se
hallaba en Barcelona con ocasión del Primer Congreso
de la Lengua Catalana-, acompañado del poeta Joan
Maragall, manifestó su desacuerdo con la obra del
Templo, porque le parecía una monstruosidad que no
se terminaría nunca y una pérdida de tiempo
y dinero.
Visitándola con Gaudí, iba repitiendo insistentemente:
"no me gusta, no me gusta, no me gusta". El arquitecto
le iba siguiendo, burlándose e imitando sus gestos
y repitiendo también sus palabras en catalán:
"no m'agrada, no m'agrada, no m'agrada". Después
del incidente se produjo una silenciosa e interesante competición
de pajaritas de papel entre los dos contendientes.
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